GRANADA. Lleno de “No hay billetes”. Tres toros de Victoriano del Río (1º, 5º y 6º), dos con el hierro de Domingo Hernández (3º y 4º) y un sobrero de Juan Pedro Domecq (2º bis). Finito de Córdoba, división de opiniones tras aviso y silencio. José Tomás, oreja y dos orejas. Rafael Cerro, oreja y oreja.
Durante la lidia del 5º de la tarde, al final de su faena José Tomás fue volteado de forma espectacular; conducido la enfermería solo se le apreció una fuerte conmoción. El de Galapagar volvió al ruedo y culminó su actuación. Por estas lesiones no pudo salir por la Puerta Grande
Al término del festejo de nuevo fue atendido en la Enfermería donde se le apreció “una contusión en parrilla costal izquierda con posible fisura de los últimos cartílagos costales así como una conmoción cerebral aparentemente superada al ser la exploración neurológica normal”.
Para confirmar estos hallazgos se decidió su traslado al Hospital Clínico San Cecilio, donde tras un estudio radiológico más amplio se le ha diagnosticado "una fractura con desviación de la séptima costilla izquierda, de pronóstico menos grave".
TOLEDO. Más de tres cuartos de entrada. Toros de Garcigrande y Domingo Hernández, manejables. Enrique Ponce, ovación y dos orejas. El Juli, oreja y oreja. Sebastián Castella, oreja y oreja. Al término del paseíllo se interpretó el himno de España con el público en pie.
SEVILLA. Poco mas de un cuarto de plaza. Dos toros de Montealto, tres del hierro Cayetano Muñoz (1º, 2º bis, y 5º) y un sobrero del Conde de la Maza (6º bis) Agustín de Espartinas, silencio y silencio. Antonio Nazaré, ovación y ovación. Pepe Moral, vuelta al ruedo y dos orejas.
En el interior de la plaza la Real Maestranza colocó numerosos lazos y banderolas de España, además en la fachada de la Puerta del Príncipe hay un cartel con la siguiente leyenda: “¡Viva el Rey!”.
ALICANTE. Un cuarto de entrada. Novillada mixta con cuatro novillos de Fuente Ymbro y dos erales de El Parralejo. Borja Álvarez, oreja tras aviso y oreja. Raúl Bravo, oreja y oreja con petición tras aviso. El novillero sin caballos Jorge Rico, ovación tras aviso y oreja tras aviso
0 comentarios