MADRID.Décimo octava del abono de San Isidro. Casi lleno: según la empresa, 22.920 espectadores (97,2% del aforo). Al fin, si tener que preocuparse del viento.
Toros de Alcurrucen (Hermanos Lozano), con presencia (570,8 kilos de promedio) y arboladuras serias; varios muy en las hechuras de núñez, pero ninguno rompió como se esperaba; aunque con nobleza, abundaron los que carecían de humillación y tenían exceso de sosería; diríase que sin ritmo. Destacó el que hizo 2º, con un buen pitón izquierdo, y el 5º, de la familia tan clásica de los músicos. Acabó tomando los engaños el cinqueño jugado en 6º lugar, llamativo para los tendidos, pero poco colaborador para el torero.
David Mora (de bermellón y oro), palmas tras un aviso y silencio. Paco Ureña (de rosa y oro), silencio tras un aviso y una oreja. Álvaro Lorenzo (azul pastel y oro), silencio y silencio.
Incidencia: Aunque el percance se produjo con el primero de la tarde, hasta concluir la función no acudió a la enfermería el diestro David Mora, donde fue atendido de un "puntazo corrido en cara posterior de la cresta ilíaca derecha y herida superficial en escroto derecho, que se sutura bajo anestesia local. Pronóstico leve salvo complicaciones”.
Los taurinos, que son imaginativos a la hora de acuñar frase definitorias, le llaman a esto “una corrida media”; es decir, que no acaba de ser ni buena, ni mala, ni siquiera regular; tan sólo cumple el expediente. Lo que ocurre es que de la familia Lozano siempre se espera mucho más, al menos ese toro extraordinario que tapa las vergüenzas de los demás, si las hubo. Hoy, sin embargo, pues eso, “una corrida media”, con un lote más potable, que le tocó a Ureña, pero que tampoco era como para tirar cohetes.
Y, en efecto, a cargo de Ureña surgieron los naturales más sentidos de la tarde. Muy en la línea del concepto del toreo que tiene el de Lorca, arrebujándose con su enemigo. Pero también dejó estampas bellas toreando por bajo. Todo con mucho sabor, pero sin momentos muy culminantes. Lo importante: se comprueba que va recuperando su sitio y su confianza; una noticia excelente para el resto de la temporada.
Muy batalladores David Mora y Álvaro Lorenzo con lotes que desmerecían la nombradía de la divisa. Detalles excelentes, pero sólo detalles. De seguro que ambos vinieron a Las Ventas para mucho más.
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