Morante de la Puebla y la Maestranza, una historia de encuentros y desencuentros

por | 29 Mar 2016 | Retazos de Historia

La historia taurina de Morante de la Puebla en la plaza de la Maestranza es larga y estrecha, posiblemente tortuosa; no siempre triunfal. ¿Cómo le recibirá la plaza después de una incomprendida ausencia de dos años? Todo quedó olvidado al primer lance… Se cumplen veinte años de su presentación como novillero en Sevilla, un 10 de abril de 1996 en el que no se dio mal la cosa. El joven José Antonio Morante alternó con Bejarano y Rondino para estoquear un encierro de Sampedro al que cortó una oreja. Pero, como en una predestinación de los tiempos que estaban por venir, en 1997 no se arregló con los Pagés para tomar la alternativa en Sevilla aunque Morante sí llegó a torear dos novilladas –con el corte de otra oreja– antes de su doctorado burgalés, apadrinado por Rincón en presencia de Cepeda.

En 1998 llegó su debut como matador de toros en Sevilla. No pudo salir mejor. Morante hizo el paseíllo descubierto en medio de Pepe Luis Vázquez y Javier Conde un 21 de abril. Cortó dos orejas al sexto ejemplar de Gavira. El diestro lograría un tercer trofeo de un cuvillo el día que testificó la alternativa de Mariscal sustituyendo a Jesulín. Hubo una cuarta oreja que marcó la diferencia y le convirtió en triunfador indiscutible del ciclo. La obtuvo a un sexto de Torrestrella la tarde del uno de mayo.

Pero Morante iba a escalar al año siguente la que –hasta ahora– es su cumbre en la plaza de la Maestranza. El torero de La Puebla abrió la Puerta del Príncipe en 1999 vestido de grana y oro después de cortar, pletórico, tres orejas a un encierro de Guadalest un 19 de abril. En su segundo compromiso –con Mora y Tomás– se marchó de vacío pero dejó preparado el terreno para el siguiente año. Tenía que ser el de su definitiva elevación a la cima. Pero la suerte fue esquiva…

La Feria de Abril de 2000 la había organizado Diodoro Canorea pero no pudo verla. Morante, que había firmado una millonaria exclusiva con el recordado empresario manchego, estaba anunciado tres tardes. No hubo trofeos en Resurrección pero el 29 de abril, acartelado con el viejo Manzanares y Rivera Ordóñez le cortó dos orejas macizas a su primer ejemplar de Victoriano del Río. Salió a por todas con el sexto, que le partió por la mitad cuando trataba de iniciar la faena con el añejo cartucho de pescao. Morante quedó roto. La Feria, también. ¿Qué había pasado con la exclusiva? El propio matador la había puesto ya en cuestión con unas declaraciones que no cayeron demasiado bien en las oficinas de Adriano. Llegaban nubarrones…

La definitiva tormenta estaba aún por venir. Aquel mismo año se produjo la caída sucesiva en los carteles previstos para la Feria de San Miguel de Curro Romero, Manzanares padre, Emilio Muñoz, Rivera Ordóñez y… Morante que, con Romero, se excusó a través de un parte facultativo presentado el mismo día del festejo. Se organizó la mundial y el resto está en la historia reciente: los dos artistas quisieron lavar la mancha actuando en un festival a beneficio de Andex y los nuevos gestores de la plaza desestimaron el evento, que finalmente se celebró en La Algaba.

La retirada de Romero sólo fue un paso natural pero en el mismo envite se inauguraban las tortuosas relaciones entre la renovada empresa Pagés y Morante, que sí toreó dos corridas en la temporada 2001 de la mano de Manolo Camará con resultados discretos. El diestro cigarrero quedó fuera de la feria de 2002 sin que faltaran declaraciones polémicas. Quería tres tardes y la empresa ofreció dos. No hubo acuerdo pero en 2003 volvió a anunciarse en la plaza de la Maestranza para anotarse una solitaria oreja de un toro de Manolo González.

La definitiva ruptura estaba por llegar. Morante se ofreció a estoquear seis toros en solitario el 12 de octubre pero la cosa se enfangó en torno al ganado a lidiar. El torero se llevó su empeño a Jerez de la Frontera y acabó con el cuadro pero la guerra era un hecho y después de romper las negociaciones para actuar en 2004, volvió a desafiar a Eduardo Canorea y Ramón Valencia anunciándose con seis toros en Madrid el mismísimo Domingo de Resurrección. No hubo triunfo pero sí retirada. El torero reconoció que tenía que afrontar un problema psiquiátrico y se marchó a Miami a lidiar con el toro más incierto de su vida. Repuesto, decidió retornar a Sevilla en 2005 pero lo hace en un único compromiso que se resolvió con ovaciones.

Las cosas se normalizaron en 2006: colocado en Resurrección, sumó dos contratos más en el ciclo continuado sin que ocurriera nada especial. Si oye alguna bronca y empieza a sentir cierto sentimiento de impaciencia en el público sevillano. Al año siguiente vuelve a descender a los infiernos después de recuperar la gloria en Sevilla y afrontar la campaña de la mano de Rafael de Paula. Pero aquello fue un choque de trenes. Corta dos orejas en Sevilla después de marcharse a portagayola y cuajar una emocionante faena a un ejemplar de Cuvillo el mismo día que Talavante abrió la Puerta del Príncipe. Pero el torero vuelve a eclipsarse después de culminar una nueva, dura y emocionante encerrona en los Madriles. La relación con Paula ya estaba rota.

En 2008, el año de las lluvias torrenciales y la lona ausente, sólo pudo cumplir una tarde en la que, arrebatado, arrancó una faena cantada a golpes de corazón a un toro de Parladé. La segunda tarde contratada, la más esperada del ciclo, fue suspendida por el agua incensante. La de 2009 fue “una feria para Manzanares y Morante”. Así titulamos el resumen publicado por El Correo, en el que también se advertía que El Juli realizó el trasteo más importante de aquel año en el que Morante llegó a cumplir cinco paseíllos.

Seguimos tirando de la hemeroteca para recordar el paso de Morante por la temporada 2010: “coronó su cumbre después de cuajar de cabo a rabo a un soso y remiso ejemplar de Juan Pedro Domecq al que acabó toreando a placer… Pero el diestro de la Puebla ya había roto todos los esquemas manejando el capote, engaño que le sirvió para instrumentar el momento más intenso de la decepcionante tarde de los victorinos. Convencido de su responsabilidad y dispuesto a reconquistar de una vez por todas la que debe ser su plaza… también había arrancado una costosa oreja de un espeso toro de Jandilla”.

Algo había cambiado y aunque la feria de 2011 se la llevó El Juli –también Manzanares– el diestro de La Puebla logró renovar su romance con el coso sevillano después de actuar el Domingo de Resurrección. También lograría revelar su raza de torero peleándose con un complicado e incierto sobrero de Javier Molina. Pero llegó 2011: José María Manzanares indulta a Arrojado; El Juli corta cinco orejas y abre la Puerta del Príncipe. Morante logra salvar los muebles gracias a un quite allí y otro aquí que no le impide salir de puntillas de la Feria.

La feria de 2012 seguía bajo el efecto Manzanares, que cortó cinco orejas y dió un recital. La llamada guerra catódica había dejado fuera a Perera y El Juli. Morante, que volvía a palpar la impaciencia de Sevilla, no pasó de unos quites de perdón aunque había esbozado algunas esperanzas esforzándose a tope el Domingo de Pascua.

La Feria de 2013 volvía a gravitar sobre las monteras del matador cigarrero, El Juli –que cayó gravemente herido– y Manzanares. Juntos abrieron el abono en Resurrección, una sola tarde que sirvió al madrileño para convertirse en triunfador del ciclo. El listón quedó tan alto, que el de la Puebla y el alicantino pulularon ese día como sombras de sí mismos. Morante era la tercera parte de este banco y uno de los nombres indiscutibles de un ciclo en el que no tuvo toros a modo. Sus recitales capoteros –incluyendo aquella media curromerizante– fueron cumbres de una Feria que saboreó a sorbitos una faena incompleta a un cuvillo. Un año después –rotas las relaciones con la empresa Pagés– llegó el eclipse. Pero eso ya se lo hemos contado.

Los trabajos originales de Álvaro R. del Moral, cronista de “El Correo de Andalucía” , se publican en su blogs “Con la tarde colgada a un hombro”, al que se puede acceder a través de nuestra sección “8 opiniones 10” y en las direcciones electrónicas:
http://blogs.elcorreoweb.es/latardecolgadaaunhombro/
http://elcorreoweb.es/toros/

Apóyanos compartiendo este artículo:
Taurología

Taurología

Portal de actualidad, análisis y documentación sobre el Arte del Toreo. Premio de Comunicación 2011 por la Asociación Taurina Parlamentaria; el Primer Premio Blogosur 2014, al mejor portal sobre fiestas en Sevilla, y en 2016 con el VII Premio "Juan Ramón Ibarretxe. Bilbao y los Toros".

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *