La «México» tiene un problema. Y no es pequeño

por | 5 Dic 2016 | Temporada 2016

Ni la programación, ni especialmente los precios. En ninguno de los dos asuntos han acertado los nuevos gestores de la monumental “México”, Javier Sordo y Alberto Bailleres. Y así les va: carteles con toreros importantes y apenas 2.000 personas en el tendido. Una ruina.

Antes de echar a andar la llamada Temporada Grande, ya lo advirtió el historiador mexicano José F. Coello Ugalde, en un esclarecedor artículo: ¿Habrá bolsillo que alcance… o que aguante?[1]. Pues ha sido que no: el bolsillo no  ha aguantado. Ni por el importe de las localidades, ni por la concentración de festejos en los fines de semana, que a su vez concentra el gasto.

Todo ello adobado con un factor que no es marginal: la subida de precios no ha ido en paralelo con la categoría de los carteles. Y a mayor abundamiento, por medio se ha cruzado la nueva paridad del dólar USA con el peso mexicano, que aún encarece mucho más la cosa.

Para el fin de semana anunciaban cuatro corridas consecutivas: de viernes a lunes, en el ciclo guadalupano.  La primera comenzando en día laborable a las 20,00 y la última en día igualmente laborable. Para la economía media, inalcanzable. Tan es así que la Empresa parece que ahora recula y trata de cambiar semejante calendario y programación. Entre otras razones, porque Joselito Adame, el actual ídolo local, no querrá verse en solitario con seis toros en una plaza con muy poca gente.

Triste es ver los tendidos tan vacíos, que en un coso tan monumental resulta una imagen desoladora. Y los primeros que están enfadados son los toreros europeos que fueron contratados: a nadie le gustar jugarse el tipo en un coso prácticamente vacío. Primero, porque no puede ser más frío el ambiente; pero, además, porque ya se ven venir la petición de la empresa de reducir los dineros pactados de antemano.

Como no hay dos sin tres, las corridas seleccionadas en el campo están dando un escaso juego. Que se lo pregunten a José Garrido, que en su confirmación de alternativa se estrelló ante un imposible. Y para colmo, la novedad que era Luis David Adame no ha podido concurrir a ninguno de sus dos compromisos.

Conocedores de la situación afirman que en toda esta dinámica, tan negativa como es, ha venido influenciada también por la devaluación que vivió la plaza del paseo de Insurgentes en la etapa anterior, cuando estuvo gerenciada por el polémico Rafael Herrerías.

Con una cosa y otra, cuando aún no ha concluido la primera etapa de la Temporada Grande, la casa está patas arriba. Ahora se verán forzados a cambiar de planificación y de precios.

Es cierto que ni Sordo ni Bailleres tienen la culpa que, con el efecto Trump, el cambio monetario se haya desplomado, para agravarles más el problema. Pero con Trump y sin Trump, la realidad es que una subida de precios que en bastantes casos ronda el 40%, no hay bolsillo que lo soporte.

 [1] José F. Coello Ugalde.  “¿Habrá bolsillo que alcance… o que aguante?”, en:
https://ahtm.wordpress.com/2016/11/page/2/

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Taurología

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Portal de actualidad, análisis y documentación sobre el Arte del Toreo. Premio de Comunicación 2011 por la Asociación Taurina Parlamentaria; el Primer Premio Blogosur 2014, al mejor portal sobre fiestas en Sevilla, y en 2016 con el VII Premio "Juan Ramón Ibarretxe. Bilbao y los Toros".

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