Ginés Marín triunfa y convence: una Puerta Grande de las que pueden hacer historia

por | 25 May 2017 | Temporada 2017

MADRID. Decimocuarta del abono de San Isidro. Casi lleno: 23.007 espectadores (96,7% del aforo). Toros de Alcurrucen (Pablo Lozano y hnos), bien presentados y ofensivos, de interesante juego, con un gran ejemplar: el 6º. Julián López “El Juli” (de teja y oro), una oreja y ovación. Álvaro Lorenzo (de azul cielo y oro), que confirmó su alternativa, ovación y ovación. Ginés Marín (de pizarra y oro), que confirmó su alternativa, ovación tras un aviso y dos orejas.
Ginés Marín salió a hombros por la Puerta Grande.

Parte facultativo: Al apuntillar al 5º de la tarde, resultó cogido el banderillero Marcos Ortiz, que fue atendido en la Enfermería de un puntazo en la corva de la pierna derecha.

INCIDENCIAS: Por acertada decisión del Presidente, Justo Polo, se alteró el curso habitual de la lidia: Álvaro Lorenzo confirmó con el 1º de la tarde y Ginés Marín, con el 3º.

Parece que era premonitorio. Por la mañana ese gran aficionado, teórico y práctico, que atiende por Guillermo Domínguez mandaba un mensaje a nuestra Redacción: “Apuesto que hoy Ginés Marín abre la Puerta Grande”. Y por ella ha salido, cuando iban a caer en el reloj las 9,30 de la noche. Le había cortado muy de verdad  las dos orejas al último de los alcurrucenes, “Barberillo” de nombre, en una faena de las que consagran a un torero.

No resulta fácil distinguir que iba  por delante, si el temple de sus muñecas, si ese torear a auténtica cámara lenta, si su decisión firme desde el primer momento… En realidad no se pueden diferenciar lo uno de lo otro, porque en el fondo la faena de Ginés Marín fue, ante todo, una obra unitaria, desde el natural en los medios con la que la inició, hasta el espadazo con el que tumbó rotundo a su enemigo. Tuvo a toda la plaza en vilo durante 10 minutos, con lo difícil que es eso en un sitio tan peculiar como Las Ventas.

El torero jerezano ha dado una gran dimensión, por lo que nos ha enseñado, que ha sido mucho,  y por lo que se entrevé que puede ser su evolución, que si los toros le respetan irá aceleradamente a más, porque además de torear con verdadero arte, tiene una cabeza despierta y bien amueblada para el oficio que ha elegido. Cuando entre los de Alcurrucen venían primado los que pronto recortaban sus nobles embestidas, Marín ya se puso de verdad, sin otra probatura, sin perder ni un minuto, ni perdonar un muletazo sentido.

Ya en su turno confirmante, Marín se mostró esperanzador. Sobre todo con la mano izquierda hubo dos series estimabilísimas. Pero a ese “Favorito” le faltaba un poquito más carbón dentro y el trasteo tuvo altibajos. Con todo, si no se hubiera hecho premiosa la forma de matar, incluso podría haber tenido mayor recompensa que la ovación que recogió desde el tercio.

Si la tarde en su conjunto ha sido de las que te mantienen despierto, en buena medida que hay que anotarlo en la cuenta de la Casa Lozano. No fue un conjunto colosal, pero tuvo es interés que rompe con lo mortecino que aburre. Muy en tipo de sus orígenes, haciéndose respetar por delante y cumplidores ante el caballo. Luego su juego fue variable: nobles pero demasiado parados resultado 1º y 4º; encastado y exigente el 2º; con calidad pero a falta de un plus de raza, el ya citado 3º; también con calidad el que hizo 5º, pero que se vino a menos. Y extraordinario el que cerró la función.

Asombra la facilidad y la inteligencia de “El Juli”. Lidió verdaderamente bien con el capote a su primero, que se revolvía en un palmo de terreno; luego, muleta en mano, trazó una faena a medias entre la buena cabeza y el bien torear. Hubo series arrebatadas, de superior factura. Lo mató por arriba y suya fue la primera oreja de la tarde. Si no se le encasquillan los aceros, le habría cortado otra al que hizo 4º, que no era ni fácil, ni cómodo. Solo gracias a esa especie de imán que parece llevar en la muleta se le podían ligar series como las que dejó en Las Ventas. Muy de magisterio ha sido lo suyo, como enseñándole a los que vienen por detrás qué cosa es el toreo, que cosa es esta profesión.

Aunque se fuera de vacío a efectos estadísticos –¡que fastidio eso de los números!–, no por eso Álvaro Lorenzo  ha pasado desapercibido en su tarde de confirmación. El buen corte que lleva dentro, quedó de manifiesto. Demostró su inteligencia en la forma con la que encaró a su primero, buscando siempre el toreo por abajo que  frenase al cabezazo que a mediado de sus acometida dejaba de regalo el de Alcurrucen. Y hubo momento en los que impuso su ley. Iba por un camino prometedor con el encastado que hizo 5º y hasta que acortó su viaje, lo llevó con gusto y temple sobre ambas manos. Parado prácticamente ya el animal, vino un sincero arrimón, pero que no tuvo mayores eco.

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Taurología

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Portal de actualidad, análisis y documentación sobre el Arte del Toreo. Premio de Comunicación 2011 por la Asociación Taurina Parlamentaria; el Primer Premio Blogosur 2014, al mejor portal sobre fiestas en Sevilla, y en 2016 con el VII Premio "Juan Ramón Ibarretxe. Bilbao y los Toros".

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