El Juli y Manzanares ponen el listón muy alto

por | 9 May 2011 | Reportajes

Concluida el domingo la feria abrileña de Sevilla –que en esta ocasión discurrió básicamente en mayo–, la Fiesta sigue. No podía ser de otra manera. Por más que un ciclo ferial relevante presente resultados llamativos, la fuerza del toreo se acaba imponiendo y el arte del toreo continua su camino.

Pero siendo así, porque es algo consustancial a la Fiesta misma, Sevilla ha marcado un ritmo, que lleva por nombre los de El Juli y José María Manzanares, dos toreros que han reafirmado en la Maestranza que hoy constituyen la base fundamental de lao que ocurre en los ruedos.

Por el momento que atraviesa, por la afición y el afán de superación que demuestran, la realidad es que han desbordado a sus compañeros de forma rotunda. El Juli, en el momento culminante de una carrera que no tiene límites por arriba, se ha consolidado como el valor seguro. Con una afición desmedida, que le transpira por todos los poros, el torero de Velilla de San Antonio ofrece hoy la imagen de la primera figura que no está dispuesta a que se le desbanque y el que quiera hacerlo mucho tendrá que arrear.

El alicantino Manzanares enamora hoy a la afición y no precisamente por razones secundarias, sino porque junto a una estética cada vez más depurada, ha alcanzado esa madurez que permite sobredimensionar el temple y parar el tiempo.

Con razones tan fundadas a sus espaldas, constituyen hoy el baluarte esencial del toreo. Es normal que en las ferias que ahora empiezan pasen a ser el armazón principal de los carteles. La riqueza de la Fiesta, sin embargo, radica en que en cualquier momento saltará otro torero dispuesto a dar réplica a los que hoy mandan. Pero tendrán que hacer un esfuerzo muy importante para ponerse a su altura.

Esta podría ser la principal conclusión a extraer de la recién acabada feria sevillana. Pero, con ser importante, no es la única, porque relevante –preocupante, también— ha sido comprobar el nivel tan bajo en el que se mueve el ganado de bravo. Y lo que más dolores de cabeza debiera dar es como no se vislumbra aún el final de este penoso túnel por el que nos movemos desde hace ya demasiado tiempo. Ni Victorino nos permitió muchas alegrías en Sevilla.

Sabido es que en la cuestión ganadera no es ni breve ni fácil el tiempo que debe transcurrir para que los signos cambien. Pero eso no quita para que preocupe que hierros que hasta ahora se iban salvando de la quema entren en el batallón de los que andan en crisis.  Es un dato más para añadir quebraderos de cabeza  a la situación ganadera.

Y en otro orden de cosas, produce alguna incertidumbre el momento que viene atravesando, ya durante demasiado tiempo, Enrique Ponce. Descontado está que quien ha comandado el escalafón durante tantos años, llega un momento que se sitúa en otro horizonte. Pero eso es una cosa y la situación que atraviesa es otra. Igualmente no deja de llamar la atención el paso atrás que en Sevilla ha dado El Cid, como poniendo en duda su recuperación de finales de la pasada campaña.

Sin pena ni gloria han pasado toreros como Castella o Talavante –este ultimo, en un mal momento manifiesto–. Preocupante debiera resultarle a su entorno el momento de Cayetano: sigue apuntando sin disparar nunca y eso en el toreo no permite sobrevivir con holgura; ahora, se lo juaga todo a la carta de Madrid. Mal sin paliativos los nuevos Tendero y Pinar, más entonado Luque y fuera de lugar Juan Mora.  Por el contrario, hecho un jabato, por encima de sus limitaciones, Rafaelillo.

Sin  suerte Morante, que es un torero siempre en puertas de dar ese chispazo que altera los pulsos. Y para sorpresa, la del nuevo matador de toros Esaú Fernández, que salvó con acierto el muy serio compromiso que suponía esta alternativa adelanta y de urgencia; ahora cambia de manos y busca el amparo de un clásico, como es Antonio Corbacho.

En suma, una feria de Sevilla en la que la luz deslumbrante de El Juli y Manzanares oculta en demasía la mucha mediocridad torea y ganadera que se han visto desfilar por el ruedo maestrante.

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Taurología

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Portal de actualidad, análisis y documentación sobre el Arte del Toreo. Premio de Comunicación 2011 por la Asociación Taurina Parlamentaria; el Primer Premio Blogosur 2014, al mejor portal sobre fiestas en Sevilla, y en 2016 con el VII Premio "Juan Ramón Ibarretxe. Bilbao y los Toros".

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