ZARAGOZA. Feria del Pilar. Corrida Goyesca. Lleno de "No hay billetes". Por orden de lidia toros de: Núñez del Cuvillo, Los Maños, El Pilar (sobrero en sustitución de un lesionado de Garcigrande), Puerto de San Lorenzo, Garcigrande y El Pilar (sobrero en lugar de uno de Parladé), de desigual presentación y juego. Julián López “El Juli” (de negro con pasamanería blanca), una oreja, silencio tras un aviso, una oreja tras un aviso, silencio, ovación tras un aviso y ovación.
Con mucho ambiente y un lleno completo, Julián López “El Juli” conmemoró sus 20 años de alternativa, encerrándose en solitario con seis toros. La tarde no resultó todo lo triunfal que el torero esperaría, pero si tuvo interés porque se vio a un torero lidiador, siempre al frente de la corrida, muy variado con el capote y tratando también de dar diversidad con la muleta. El computo final de 2 orejas no refleja del todo lo que había sido su actuación, porque también pudo cortar trofeos con el buen toro de Los Maños y con el primer sobrero de El Pilar, pero la espada se interpuso en su camino.
Devuelto tras partirse un pitón el Garcigrande enchiquerado para abrir la función, se corrió turno y salió un buen toro de Núñez del Cuvillo, muy justo de fuerzas, con el que El Juli se pudo centrar en muchos momentos sobre ambos manos, aunque siempre sin poder entrar a fondo. También colaboraba el ejemplar de Los Maños, con un muy potable pitón izquierdo; el torero lo supo aprovechar, para luego someterlo con poder sobre la mano diestra, en la que puede considerarse la faena más sólida de la tarde.
Con el primer sobrero de “El Pilar”, “El Juli” construyó un trasteo que fue de menos a más ganando en intensidad, hasta lograr unas series finales muy estimables, bien culminadas con la espada. En cuarto lugar correspondió lidiar uno de Puerto de Sal Lorenzo, pronto pero con aspereza en los embroques, que impidió en gran medida que la faena tomara vuelos.
Como quinto apare ciño en el ruedo otro de Garcigrande, con más cara que remate, que tomaba los engaños con un incomodo cabeceo; “El Juli” acertó a imponer su mando sobre la mano derecha, en otra faena que fue a más, ara luego volver a emborrarlo todo con los aceros.
El segundo sobrero de “El Pilar” que sustituyó al de Parladé para cerrar la tarde, iba con cortas embestidas y poca fijeza; de nuevo “El Juli” se mete en terrenos comprometidos, pero desigual suerte.
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