Bajo mínimos

por | 1 Jun 2017 | Temporada 2017

MADRID. Vigésima primera del abono de San Isidro. Lleno de “No hay billetes”: 23.798 espectadores. Cinco toros de Juan Pedro Domecq, pobres de presentación y muy bajos de casta, poder y de clase, tres ellos cinqueños: 1º, 4º y 6º; un de Juan Manuel Criado (5º), cinqueño, de mejor juego. José María Manzanares (de granate y oro), palmas y silencio. Cayetano ( de azul cielo y oro), silencio y ovación. Joaquín Galdós (de teja y oro), que confirmó su alternativa, ovación tras un aviso y silencio.

INCIDENCIAS: En su localidad habitual asistió al festejo S.M. el Rey don Juan Carlos, acompañado por la Infanta Elena; los tres espadas le brindaron uno de sus toros. 

Lo de esta tarde es lo que da la razón a quienes, a modo de crítica, se refieren al hierro que fue de Veragua como “una juanpedrada”. Para afirmar algo a ciencia cierta, habría que haber estado presente en todos los entresijos del reconocimiento y el sorteo. Pero desde el desconocimiento de tales vericuetos, lo que no se alcanza a comprender es como un criador que cuenta con unas camadas muy amplias, no haya sido capaz de presentar en Madrid seis toros sin tacha para los examinadores gubernativos., sino que tuvieran que acudir a Juan Manuel Criado para completar los lotes.

Los juanpedros eran muy mejorables en presentación, como se puso de manifiesto en las protestas de una parte de la plaza. Pero no resulta necesario hacer causa de este factor: en lo que va de San Isidro se han lidiado sin protestas reses de menor trapío; Lo que de verdad alarma, y mucho, es que por segundo año consecutivo los que se pudieron lidiar demostraron un plena carencia de casta y de poder. En este año 2017, llegaron a límites que no cabe aceptar ni dentro de ese eufemismo que se denomina “el toro predecible”. Fracaso rotundo, sin paliativo alguno que endulce la muy dura realidad, que no la tapa ni una buena manta zamorana. Para un criador que se anuncia en Madrid tiene que resultar indigesto que el único toro que medio permitió el toreo fuera de otra divisa, en este caso de la también de origen juanpedrista que gobierna Juan Manuel Criado.

Pero hay que reconocer también que en un sector de la aficion de Madrid al hierro de los juanpredros le han puesto una especie de estigma que va más allá de la lógica: se presupone de antemano cuál va a ser el mal comportamiento de sus toros. Y la verdad, los habrá con deficiencias, pero también los hay soberbios. Hacer juicios antes de ver la realidad conduce a estas situaciones.

Pero, sea como fuere, cuando falta la materia prima, lo normal es que llegue la sequía. Completa resultó la de José María Manzanares:  se pareció a la tarde gloriosa de la Beneficencia del pasado año tan sólo en el paseíllo. Cierto que ninguno sus dos juanpedros regalaban opciones. Pero quien es figura no puede pasar por Madrid como mirando hacia otro lado, que es lo que hizo durante toda la tarde.

Tuvo en sus manos Cayetano romper el mortecino discurrir del festejo, con el toro de Criado, un cinqueño que tuvo buen aire. Pero no alcanzó a redondear la cosa. Toreó con gusto con el capote, se creció con unos ayudados por alto, dejó unas primeras series con naturalidad, pero a partir de ahí vino a menos una faena a la que faltó temple, ajuste y reunión. Aunque este “Naufrago” no fuera la alegría de la huerta, sí permitía un mejor trato. Y eso que Cayetano hubo momentos en los que se arrebató, pero fuerza tanto la figura –ese  exageradísimo despatarrarse es hasta antiestético– que queriendo o no acaba echando a los toros hacia fuera, impidiendo además la ligazón. Con todo, vimos a un Cayetano muy recuperado, aunque sin llegar al nivel que tuvo en Sevilla o en Valencia. Y vimos, sobre todo, que la afición de Madrid le respetó. Quedamos a la espera de la Corrida de la Cultura.

Debe decepcionar bastante venir a confirmar a Madrid en un cartel de figuras y que luego los toros no colaboren. Por ese trance pasó Joaquín Galdós, que es bastante más que “el otro peruano”: tiene el oficio bien aprendido, maneja muy correctamente los engaños y no anda falto de decisión. Es de suponer que mucho lo fiaba a este jueves madrileño. Fuera de certificar su esfuerzo y sus buenas intenciones, poco más pudo escribir de nuevo en su historial. Una cosa quedó clara: su futuro no está escrito, que todavía puede dar sorpresas.

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Taurología

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Portal de actualidad, análisis y documentación sobre el Arte del Toreo. Premio de Comunicación 2011 por la Asociación Taurina Parlamentaria; el Primer Premio Blogosur 2014, al mejor portal sobre fiestas en Sevilla, y en 2016 con el VII Premio "Juan Ramón Ibarretxe. Bilbao y los Toros".

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